martes, octubre 31, 2006

Necesito de la luz


Queridos humanos:

Escuchando a Carlos Chauen y deseando compartir sus canciones* me dispongo a escribiros unas letras. Palabras que quieren comunicar y que a menudo se duermen en mi pensamiento sin dejar rastro en el papel. Palabras que se pelean por ser las idóneas , las correctas, olvidando que una de las facetas más importantes de saber comunicar es ser capaz de expresar lo que pasa por dentro y no aquello que nos parece que rima , que entona o que "pega".
Comunicar
, como dice el psicólogo y escritor Ferrán Cortés ,es lo que nos ayuda a crecer y cuando nos comunicamos, lo estamos haciendo para amar.

Quizás entonces, yo esté evitando amar ( bendita palabra, ¿ quién nos enseñará?*) porque llevo unos meses sin comunicarme con vosotros . A veces, por no decir siempre, necesitamos escucharnos a nosotros mismos para poder hacernos entender por los demás ( necesitamos conectar con nuestra intuición y nuestro corazón).

Por fortuna para los que contínuamente estamos buscando, existen los libros, y yo encontré uno bastante sencillo ( a la par que interesante :) ) sobre la comunicación interpersonal . Se llama "Cuaderno de Bitácora" y es del autor antes mencionado. En él se describen los cinco pasos esenciales para que haya una buena comunicación:

1. La primera habilidad o paso para comunicar es precisamente querer hacerlo y encontrar el tiempo para hacerlo. ( Me viene a la cabeza un cortometraje en el que el protagonista acudía a un programa dónde se podía ganar tiempo , minutos , segundos, para tu vida diaria. ¡ A ver los cinéfilos si me echan una mano! , no recuerdo el nombre.)

2. El segundo paso, sería escuchar con atención.

3. La tercera habilidad o paso es estar en contacto con nuestros sentimientos , evitar que nos gobiernen.

4. Ser capaces de captar los sentimientos del otro (empatía) para poder conectar con él.

5. Acompañar a la otra persona.


Expuesto de ésta forma parece que sólo se puede aplicar a la comunicación entre dos personas que tiene un proyecto de vida común, pero no es así. Estos cinco pasos nos pueden dar las herramientas necesarias para alcanzar una buena comunicación con cualquier ser humano sea cual sea nuestra relación.


Cambiando de tercio , quería hacer un breve comentario sobre la última entrada que realizó mi compañera Leo. Hablaba de la utopía y de cómo ésta puede dignificar el espíritu. Yo estoy totalmente de acuerdo con ella, es más, quisera citar las palabras de una mujer que lleva años luchando por un mundo más justo y que fueron las que más me conmocionaron de las Jornadas de Solidaridad que se celebraron en Cartagena la semana pasada.
Ella dijo algo así: "Si nosotros pensamos en lo utópico como ideal para alcanzar nuestros objetivos, nuestros metas y nuestros sueños, éstos siempre estarán cerca de lo inalcanzable, y es ahí a dónde tenemos que llegar".

¿ Y porqué no? ¿ qué o quién nos impide mirar a lo más alto? ¿ a qué tenemos tanto miedo?
¿ quién cree realmente en sus sueños?...ahí van esas preguntas...

Miles de sonrisas, hasta pronto.

Susana



1ª *= "Además de tomar aire, necesito tomar parte. Necesito tomar parte de la luz, una inyección de corazón, un beso donde quieras y un vasito de cerveza, que la vida pasa en un vagón y no tiene banderas, te invito a dormir en un rincón de cualquier escalera..."

2ª*= " El amor sólo es posible cuando dos personas se comunican entre sí desde el centro de su existencia. Sólo en esa experiencia central está la realidad humana, sólo allí hay vida, sólo allí está la base del amor" Erich Fromm. " El arte de amar"

1 comentario:

Leo García-Jiménez dijo...

Suxi! Qué alegría "verte" por aquí!!!

UN gustazo que vuelvas a comunicarte con todos nosotros.

Como me comentaste el otro día, leí ese librito y la verdad es que me gustó.

Creo que muchas veces, damos por sentado que nos estamos comunicando con el otro cuando en realidad no lo estamos haciendo. No viene mal recordar de vez en cuando las pautas que da Ferrán Cortés.

El caso es que en relación al "arte de escuchar", podríamos decir muchas cosas, como que no lo hacemos bien, escuchamos a ratos (escucha selectiva); hacemos que escuchamos, aunque realmente no lo estamos haciendo (escucha fingida) o escuchamos sólo a nivel intelectual.

Creo que lo ideal es escuchar en el plano intelectual, pero también en el emocional (escucha empática). Es decir, no sólo entender lo que el otro me dice, sino también lo que el otro siente, poniéndome en su lugar.

Sería algo así como sintonizar intelectualmente y emocionalmente...NO?

Bueno Susi, welcolme again!

Besssss