sábado, marzo 27, 2010

¿Es la democracia una solución universal? Apuntes sobre el V encuentro España-África y el diálogo habermasiano

Central African women inspecting building for microfinance project by hdptcar.

La foto, como siempre, en flickr

Ya estoy en Murcia. Han sido las últimas semanas un cúmulo frenético de circunstancias. Gané una plaza de profesora en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Murcia a principios de marzo y, a partir de ahí, todo fue uno. Preparar el viaje de regreso a España desde mi querido y añorado Boulder, incorporarme a mi nuevo puesto de trabajo, renunciar a mi beca postdoctoral de investigación (ay! cómo me costó!), empezar a dar clase, despedir de manera repentina a un familiar querido y muy cercano, arreglar la cuestión de mi visado en la embajada de Estados Unidos en Madrid… La Semana Santa me viene en el momento más oportuno. Tendré unos cuantos días para descansar (al fin!) y tomar fuerzas para mi nuevo regreso a Estados Unidos, donde me quedan cuestiones pendientes que no pude cerrar en marzo. Pendiente también queda actualizar este blog con mi nueva ubicación geográfica, aunque todavía no, todavía no puedo hacerlo.

Pero no quería hoy yo hablar sobre mis idas y venidas, sino sobre el V encuentro internacional España-África mujeres por un mundo mejor, acerca del papel de la mujer en la sociedad, evento que se está celebrando durante este fin de semana en Valencia. Están allá todas nuestras políticas, también la reina. Hablan de impulsar la democracia en África, la democracia como solución al problema africano y por ende al problema de la exclusión social de la mujer. Y yo me pregunto si hemos aprendido algo tras siglos de colonización primero, descolonización después. Este tipo de encuentros me huele a propaganda, a malgasto de los fondos públicos, a cutres lavados de imagen e incluso de conciencia. De nuevo analizamos el mundo desde nuestro eurocentrismo encorsetado, estático, enquistado. Seguimos creyendo en las soluciones universales y ahistóricas en el sentido planteado por Descartes, mentalidad positiva que creo no nos ha dado demasiados buenos resultados a nosotros, los países occidentales que hemos tratado de imponer nuestro sistema político (otrora también religioso) allá donde hemos asomado el hocico. Seguimos creyendo en la superioridad de occidente y nos autonombramos los salvadores del mundo, “pobres africanos, qué harían sin nuestra filantrópica intervención”…

La democracia ha funcionado bien (la raída máxima de que es el sistema menos malo) en la cultura occidental. Pero me pregunto si es el modo más adecuado para el caso africano. Cuando apareció el sida a finales de los 70, el movimiento gay de San Francisco impulsó foros en los que las comunidades afectadas debatieron y propusieron sus propias soluciones. Salida histórica y contextualista (leí un artículo inédito muy bueno de Merrit Dukehart sobre esto). Y esta misma lógica de que emerja la solución desde dentro más que desde fuera, podría ser aplicada al caso africano. Si es la democracia el sistema adecuado para los países africanos, que sean sus actores sociales (empezando por la sociedad civil) quienes lo decidan, ni ONU, ni ONG´s, ni gobiernos occidentales. No sé cuál sería el resultado de un debate profundo y habermasiano entre los distintos actores que conforman el tejido social africano. Quizá el resultado nos sorprendería. ¿Estamos dispuestos a ello?

lunes, marzo 01, 2010

Sobre el desconocimiento de Vico por parte de Buñuel y la Academia de Cine Española

No, ni Buñuel conoció, ni la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España conoce a Vico y su humanismo retórico. El otro día, viendo en directo la gala de los Goya (los Oscars españoles), me llamó especialmente la atención la cita de Luis Buñuel acerca del conocimiento científico: “La ciencia no me interesa. Ignora el sueño, el azar, la risa, el sentimiento y la contradicción, cosas que me son preciosas”.

De nuevo, desde el espacio público, se estaba denostando el papel de la ciencia, lo que no es en ningún caso excepcional en nuestra época posmoderna de rechazo o pérdida de atracción de los grandes metarrelatos modernos (desde Dios, pasando por la Ilustración, hasta las ideologías). Supongo que esta cita tiene una mayor relevancia si tenemos en cuenta que, supuestamente, la gala de los Goya es la cita de la "intelectualidad española". Digo supuestamente porque aquello me olió a todo menos intelectualidad. No quiero entrar aquí a definir qué es un intelectual, pero si hablamos de un agitador de conciencias y un crítico frente al poder establecido, los artistas españoles (empezando por Pedro Almódovar y terminando por Pilar Bardem) son de todo menos intelectuales. No necesito irme muy lejos para poner un ejemplo de intelectual con gran repercusión mediática y con gran llegada a las audiencias: Arturo Pérez Reverte (la entrevista que publicaba hace un par de días el periódico El Mundo no tiene desperdicio).

Pero no, no era mi propósito hoy discernir entre intelectual y artista o persona pertenciente al mundo de la cultura. Tampoco entrar en la cuestión de que si España quiere salir de la crisis, no tendrá más remedio que pasar por el aro de la Investigación, el Desarrollo y la Innovación (ya sabemos, el I+D+I), pasar por esa ciencia que parecen rechazar los artistas españoles (quiero creer que por ignorancia).

Me interesaba hoy aquí recuperar la Ciencia Nueva de Giambattista Vico. El filósofo italiano planteó ya en el siglo XVII un paradigma científico alternativo a la racionalidad cartesiana y reivindicó la actividad del espíritu humano y el importante papel de la poesía, la imaginación y la metáfora como fuentes de conocimiento. La figura del poeta como gran conocedor del mundo también fue reivindicada por Unamuno. Para Vico este es el paradigma fundador de la racionalidad, racionalidad que Descartes redujo a la matemática y los objetos que podían adecuarse a ella. "El ingenio, la fantasía y la metáfora son las que ponen las bases para una actividad racional. Es decir, la filosofía tópica, basada en la inventio, es anterior a la filosofía crítica, que se basa en la demonstratio. Anteriores a los universales racionales, estarán los universales fantásticos" (p. 416 del artículo Humanismo retórico, Viquismo y Unamunismo).

Pues eso, que la ciencia debería interesarnos a todos. Porque no toda ciencia está focalizada en el paradigma racional cartesiano (he ahí las ciencias sociales y las humanidades). Y porque esa ciencia natural de carácter más "duro" es fundamental para la superación de la crisis que está atravesando España.